Es sabido que los seres humanos disponemos de un lenguaje comunicativo a través del cual nos expresamos libremente frente a los demás y conseguimos nuestros propósitos. La argumentación es una parte muy importante de esa comunicación, ya que como veremos es a través de ella que establecemos conclusiones lógicas y conseguimos convencer o persuadir a los demás. Por tanto, el interés por estudiar todo lo relacionado con la argumentación es muy relevante. De hecho, el estudio de la argumentación en la actualidad está resurgiendo gracias a la influencia de los medios de comunicación, donde está especialmente presente en la publicidad y en la política.
No obstante, dentro del campo de la argumentación especificaremos aún más nuestro objetivo, centrándonos en el papel que juegan las intenciones en las argumentaciones (retóricas) de un hablante. Hemos decidido focalizar nuestro interés en este punto debido a que, a menudo, los teóricos que se centran en los procedimientos argumentativos parecen dejar de lado la intención de los argumentadores para evitar el psicologismo. Sin embargo, ¿es del todo legítimo considerar las argumentaciones de un hablante sin tener en cuenta sus intenciones? Hay diversos motivos por los que deben ser atendidas y en este trabajo se señalarán algunos de ellos. En primer lugar, intentaremos delimitar lo que entendemos por ‘argumentación’ e ‘intención’, para tener algunas ideas previas claras. Posteriormente, se hablará de la importancia de las intenciones en la comunicación en general, entendiendo que la argumentación es un elemento importante de la comunicación a la que también afectan las intenciones. Finalmente, se establecerá una relación entre los actos de habla y la argumentación para justificar al mismo tiempo la conclusión del trabajo, a saber, que las intenciones juegan un papel positivo en la argumentación.