A comienzos del siglo XX era común asumir que la representación y
evaluación de los contenidos proposicionales podía realizarse
eficazmente haciendo uso únicamente de los sistemas
lógico-lingüísticos. Sin embargo, desde la filosofía del lenguaje y la
pragmática se han alcanzado resultados que confirman que lo que decimos
excede esencialmente los recursos semánticos de lo lingüístico. También
una serie de demostraciones en el seno de la lógica matemática mostraron
la incapacidad de cualquier sistema formal suficientemente expresivo
para probar todas sus verdades. Este trabajo analiza las relaciones de
similitud de dichos resultados –procedentes del lenguaje natural y de
los lenguajes formales–, que nos conducen a una conclusión general: no
es posible determinar contenidos proposicionales completos atendiendo
únicamente a los elementos lingüísticos, pues para ello es necesario
recurrir a factores contextuales.
PALABRAS CLAVE: contenido, incompletitud, significado, pragmática.